Blog

Viernes Bizarro… La importancia de un buen eslogan

12 de Dic de 2014 | Viernes Bizarro | 6 comentarios

A la hora de llevar a cabo una campaña publicitaria, la elección del eslogan es una parte especialmente delicada. La frase tiene que sonar bien, transmitir los valores de la marca y, sobre todo, debería quedarse grabada a fuego en la mente del consumidor. Todos sabemos qué nos venden cuando escuchamos que “Cunde más de lo que cuesta”, cuando nos preguntan “¿Te gusta conducir?” o cuando nos cantan “I’m loving it” (si no tenemos una pareja anglófona. Si la tenemos y cuando escuchamos eso pensamos en hamburguesas, tal vez sea hora de buscar una nueva pareja).

Como todos los expertos de Viernes Bizarro ya sabéis, hay muchas formas de conseguir que los consumidores se queden con una campaña publicitaria (por ejemplo, traumatizándolos). Los dos anuncios contrincantes de hoy triunfan a la hora de captar nuestra atención gracias a un sencillo eslogan que, estamos seguras, tardaréis bastante en olvidar.

 

Del culo a la boca

Cuando la salmonelosis es el menor de los problemas

 

Aquí tenéis a Huevos Álvarez, aka «del culo a la boca». Sin duda, estamos ante el eslogan que cualquiera querría leer en lo referente a su comida. Obviamente entendemos lo que los señores Álvarez nos quieren explicar con este anuncio, aunque les pondríamos el pero de que su cartel no especifica exactamente del culo de quién vienen los huevos. Intuimos que de las gallinas, pero como consumidores del siglo XXI preferimos no dar nada por supuesto.

Desde Oh My Word! manejamos dos teorías con respecto a este anuncio:

  1. En Huevos Álvarez sabían perfectamente lo que estaban haciendo cuando escogieron anunciarse de esta forma.
  2. En Huevos Álvarez nadie reparó en que «del culo a la boca» no era la mejor opción para explicar lo frescos que son los huevos.

Nos sentimos incapaces de decidir cuál de las dos opciones nos gusta más.

 

Maquinilla púbica

Awimvawe, awimvawe awimvawe, awimvawe…

[blockquote type=»type-2″ align=»align-left» sc_id=»sc1418213126089″]¿Está tu tigre perdido en la jungla?[/blockquote]

Nos figuramos el brete en el que se vio este publicista cuando le plantearon el reto de anunciar una maquinilla para rasurar el vello púbico sin usar las palabras pene, pubis y vello (porque es la única explicación lógica que encontramos a este anuncio). Nos lo imaginamos paseándose con la Retórica de Aristóteles (el manual del publicista) debajo del brazo, estrujándose los sesos para dar con el mejor eufemismo. ¡Lo tiene! Cambia vello púbico por jungla y pene por tigre. Y nosotras nos preguntamos ¡¿en serio?! Ya que opta por esa opción, como mínimo podía respetar la cultura popular, que el que dormía en la jungla, la negra jungla, era el león.

En cualquier caso, resulta evidente que las chicas de Oh My Word! estamos lejos de entender los mecanismos mentales de este creativo. Este es un anuncio creado por y para hombres y la prueba está en la explicación paso a paso de cómo podar la jungla para permitir que «tu tigre se alce orgulloso en la llanura». Sin palabras.

Los que no os podéis quedar sin palabras ahora sois vosotros, porque es el momento de votar. ¡Que gane el mejor peor!